La tuberculosis es una infección causada por una bacteria. El principal sitio afectado son los pulmones, sin embargo, también puede existir tuberculosis en el cerebro, vías urinarias, hueso, intestinos, etc.

El contagio puede presentarse al convivir con personas que tengan la infección de forma activa y puede causar tos, flemas, fiebre, pérdida de peso, escalofríos y algunos otros síntomas durante varias semanas o meses.

Es importante detectarla a tiempo, ya que es una enfermedad completamente curable con tratamiento mediante algunas tabletas, con lo que se pueden evitar varias secuelas y el contagio a otras personas.